Internet ha cambiado las reglas del juego. Hace años, las empresas que no trataban correctamente a sus clientes no eran sancionadas por una razón muy sencilla: las personas ni siquiera se enteraban de que las compañías les trataban mal. Además, antes no estaba mal visto engañar a los consumidores porque, simplemente, no era visible.
Ahora, en la era digital, todo es diferente. Cada fallo, cada mentira, es conocida al instante por todos. Un único error y el negocio se puede ir a pique. Éste es el resultado de la inmensa ola de transparencia que internet ha traído a nuestra sociedad, una ola que arrasará con las empresas que no tengan al cliente como único protagonista.
Si tu empresa no se encamina en esta dirección, no sobrevivirá. Por el contrario, si se orienta hacia el cliente, crecerá. ¿Cómo? Porque tendrá la oportunidad de aumentar su capital creando una comunidad de personas fieles que harán crecer la marca.
Con este libro, y gracias a casos reales de empresas que fracasaron y de otras que lo hicieron bien, aprenderás a tratar a los clientes con respeto, cercanía y humildad. Se trata de una filosofía de trabajo que no sólo mejorará tu vida profesional, sino también la personal, pues actuar con valores te hará más feliz.